Muchos emprendedores creen que con crear un producto o un servicio ya basta. Pero eso no es más que una burda falacia. Para erigirse como una marca, debes contar la historia que dio lugar a esa marca.
Esa historia que combina una vertiente personal con la misión de la empresa creada para hacer que tus clientes, tu público potencial, y tu inversores se interesen por esta. En esta publicación te mostraremos las tres maneras más comunes para escribir el storytelling que te hará despuntar en esa vorágine de oferta y demanda a la que se le llama mercado.
Historia 1: “La manera de hacer las cosas debía cambiar”
Ser líder vende. Así que afirmar que la forma en la que tú haces las cosas es tan diferente y efectiva que ha obligado a tu competencia a cambiar sus procesos gustará a tu público. Pero atento: no te vendas como disruptor hasta que realmente hayas cambiado algo. Y eso es lo que hizo Ernie García, fundador de la empresa Caravana, una página web que permite a los usuarios buscar, financiar, comprar y recibir un vehículo usado sin lidiar con los vendedores. Caravana ha roto con un modelo de compra venta que llevaba más de 75 años inmóvil. Por ello, desde 2013, esta empresa ha recaudado 300 millones de dólares a través de inversores y sus ingresos rondan los 200 millones.
Historia 2: “Creamos algo nuevo porque no existía”
Esta historia quizás es la más común: quería algo que no existía, así que lo creé. Los consumidores se identifican con esta máxima porque es sencilla y porque les gusta que alguien les ofrezca algo que satisfaga alguna de sus necesidades. Sabemos que es difícil crear algo nuevo así que no te preocupes, puedes contar esta historia incluso si antes de tu producto ya existía algo similar pero que resultaba insuficiente.
Harry’s, una empresa que vende navajas para rasurar el vello facial, explica su historia alegando la multitud de marcas de navajas que existía, la mayoría muy costosas debido a su alta inversión en marketing de producto pero que al contrario, pecaban por su baja calidad. Es así como Harry’s convenció a sus clientes de su historia, y como la empresa los convenció de su valor añadido, fuese este real o no.
Historia 3: “Tenemos la solución a tu problema”
Con esta historia se pretende llamar la atención de tu cliente para que este identifique como problema algo que no lo consideraba como tal de manera consciente. Para conseguirlo, es necesario conocer en profundidad a tus consumidores: sus necesidades, estilos de vida y hábitos de consumo.
Un ejemplo es HoneyBook, una compañía que ofrece servicios de contabilidad, asesoría y facturación, entre otros. Esta empresa se vende como la marca que te hará “recuperar tu vida”. De esta manera, vende los beneficios que le reportará al target, en este caso los trabajadores de la industria de planificación de eventos, y no se centra en las funciones de la empresa como tal. ¿Sencillo verdad? Pues esta estrategia le ha valido una suma de más de 32 millones de dólares en inversiones.
Para saber más sobre este tema o para resolver cualquier duda contacta con nosotros sin compromiso..