Las nuevas empresas deben conocer a la perfección cómo analizar al detalle de dónde provienen todos los gastos relacionados con la puesta en marcha del negocio. En muchos casos, podemos evitar gastar por cosas superfluas, y en otros casos los gastos serán necesarios.
Uno de los aspectos en los que los ahorros en costes pueden ser notables y en los que no se suelen prestar mucha atención es en la partida que conocemos como commodities. Uno de ellos, y del que hoy nos ocuparemos es la partida de la electricidad.
Y es que la electricidad es un recurso básico para cualquier compañía, por pequeña que sea. El problema es que en muchas ocasiones algunos emprendedores desconocen las variables que influyen en el precio de la luz que acaban pagando a final de mes, ya que existe una tendencia a penar que el 100% del precio final está relacionado con el coste de generación de la energía eléctrica. La realidad es bien diferente. Por eso, el siguiente artículo pretende vislumbrar a los emprendedores, pymes e incluso grandes compañías algunos de los secretos de la factura de la luz que recibimos mensualmente.
Un análisis de la factura eléctrica
Por norma general, la energía eléctrica que consumimos se mide en kwH. Aunque esta no es la única variable que determina el precio final. Conocer en detalle los componentes que las grandes compañías eléctricas nos cobran en la factura de la luz nos permitirá tener un mayor control de nuestros gastos e incluso, escoger una comercializadora más eficiente mediante la que pagar menos por el mismo servicio.
A grandes rasgos, estos son los principales costes asociados a la factura eléctrica:
- Costes de la generación de electricidad: las instalaciones de las grandes productoras de energía eléctrica tienen un gran coste de construcción, mantenimiento y funcionamiento que se sufragan en gran parte por el precio que abonan los usuarios. Además, las generadoras que no utilizan renovables para la producción de electricidad necesitan otro tipo de combustibles para conseguirlo, como por ejemplo las centrales térmicas de carbón o los ciclos combinados de gas natural. Estos combustibles no son precisamente baratos, y su coste se incluye de forma íntegra en el precio de la luz.
- Peajes de acceso a las redes de transporte y distribución: otra de las variables que muchos emprendedores desconocen a la hora de analizar la factura de la luz de su empresa es el que se relaciona con la red de distribución de la energía. Aunque parezca extraño, las compañías productoras de electricidad no controlan de forma directa todo el sistema de distribución de la electricidad en España. Por eso, en el precio de la luz se incluyen otros costes adicionales relacionados con el acceso a esta red mediante la que la electricidad llega a pymes, grandes compañías y hogares de forma efectiva.
- Los cargos: este tipo de costes tienen un origen gubernamental y están relacionados estrechamente con la política energética del país. Por norma general, este tipo de cargos a modo de impuestos cubren: el sobrecoste de la generación de energía eléctrica en Canarias y Baleares; la retribución correspondiente a algunas unidades de generación de luz a partir de fuentes renovables; el coste relacionado con los mecanismos de capacidad y finalmente el coste financiero del déficit del sistema eléctrico.
Pero el precio de la luz que pagamos con la factura eléctrica no cubre de forma íntegra todos los gastos generados. Como por ejemplo, los gastos derivados del reciclado y la recuperación de los materiales utilizados en las infraestructuras eléctricas; los costes relacionados con el agotamiento de los recursos de energías no renovables, que deberían cubrirse para investigar sobre nuevos métodos de producción energética; o finalmente los costes para reducir el impacto medioambiental en la producción de energía eléctrica.
En definitiva, el precio de la luz está compuesto por muchos componentes que inciden directamente en la factura de la luz que tanto pymes, como emprendedores y hogares deben hacer frente cada mes. Por eso, conocer mejor de dónde vienen y que son es sinónimo de eficiencia y una oportunidad para escoger la tarifa eléctrica que más nos convenga. Y es que el mercado eléctrico español está abriendo poco a poco el abanico de posibilidades y existen muchas comercializadoras eléctricas que optimizan el precio de la luz mediante la reducción de cargos en la subasta del pool eléctrico.